Los cambios económicos que ha vivido España ha propiciado que los consumidores cambien su forma de consumir en lo que respecta a diversos sectores. En la actualidad, por poner un ejemplo, los consumidores están dejando de acudir a las grandes superficies comerciales situadas a las afueras de las ciudades para, por ejemplo, llenar el carrito de la compra. Ahora están apostando por acercarse al establecimiento más cercano a su domicilio y realizar la compra del día a día.
Esta dinámica se está extendiendo a diversos sectores que están apostando por reforzar su presencia en centros urbanos llevando su modelo de negocio a un punto de proximidad con el cliente que le garantice seguir con su nivel de ventas y tener presencia en zonas donde antes no la tenían.
Uno de los motivos principales de acercar la franquicia al centro de las ciudades es el ahorro que consigue el cliente. Este ahorro se escenifica principalmente en el tema del desplazamiento, ahorro de combustible y también un considerable ahorro de tiempo, hecho muy valorado.
En cuanto a los sectores dentro de las franquicias que están apostando más por esta modalidad de acercar su punto de venta al centro de las ciudades destaca el sector de la alimentación, que ha pasado de construir grande hipermercados a pequeños establecimientos que franquician en zonas urbanas donde se acercan al consumidor de a pie y aumentan su cuota de mercado.
En suma, esta nueva tendencia de acercar el negocio a la ciudad ha supuesto un doble beneficio, para el público en general que evita desplazamientos con el consiguiente ahorro económico y de tiempo y para los futuros emprendedores que ven en esta modalidad una nueva oportunidad en la que invertir sin tener que hacer inversiones económicas desmesuradas.
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