Javier Alcázar, coordinador ejecutivo de Economía y Trabajo de IU, pidió ayer al Gobierno «prudencia y menos triunfalismos» ante la valoración que ha realizado de la reforma laboral, a la que el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha calificado como «histórica».
Para Alcázar, se trata de una afirmación «exagerada», ya que, en su opinión, esta reforma laboral «apenas» representará una disminución real de la temporalidad y de la «gigantesca» rotación que afecta a casi 6 millones de trabajadores.
«Lo más importante del acuerdo, gracias al buen trabajo sindical, ha sido evitar la inclusión de un mayor abaratamiento y flexibilización del despido, tal como pretendían tanto el Gobierno como los representantes de los empresarios», destacó.
El dirigente de IU afirmó además que tiene «poca justificación el trasvase tan importante de recursos» que se va a producir a las empresas. Así, señaló que las políticas de gasto en bonificaciones no van a representar un vehículo «suficientemente efectivo» para atajar los descontrolados niveles de temporalidad y precariedad en el mercado laboral.
Para Alcázar, el acuerdo contempla aspectos «muy preocupantes», que IU tratará de modificar en el Parlamento. Entre ellos, considera «verdaderamente sangrante» la rebaja de cotizaciones de los contratos que gestionan las ETT’s.
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