Este sábado, un CEO cambiará su ordenador de empresa por el palo de golf. Además, en vez de traje, irá de polo, pero manteniendo la misma elegancia corporativa.
Ya ha pedido consejo a su equipo de ventas sobre este deporte y sobre cómo hacer un hoyo en uno y evitar que la bola le haga una corbata…y no de las que suele llevar a la oficina.
Lo que es seguro es que este sábado, el green tendrá nuevo liderazgo… y probablemente alguna bola en el lago.
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