Espíritus, fantasmas, almas en pena que se han quedado en el plano terrenal porque tienen asuntos pendientes…La temática fantasmagórica y espiritual es fascinante, y aunque a algunos les aterrorice, otros la encuentran de lo más intetesante y esperan con ansias experimentar un suceso paranormal en sus propias carnes. Un claro ejemplo es este grupo de directivos al que le pareció una idea maravillosa acudir a altas horas de la madrugada al cementerio de un pequeño pueblo. Si bien es cierto que los cementerios tienen un aura tenebrosa atractiva, acudir voluntariamente puede resultar extraño. A pesar de que estaban convencidísimos de que «alguien» trataría de contactar con ellos, lo único que sintieron fue el frío del otoño y no el del más alla.
Otra vez tendrán más suerte…o no.
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