Recursos Humanos RRHH Digital El equipo del movimiento Corre1Km+ (movimento solidario patrocinado por el Banco Santander a favor de Cruz Roja para dar formación a personas y niños en dificultad en España) se ha enfrentado a una de las pruebas de larga distancia más extraordinarias del calendario runner. Quizá los 160 kilómetros más bellos del mundo bajo refugio de los picos más altos del planeta. La carrera de las carreras que se celebró en la provincia de Darjeeling desde el 25 de octubre pasado hasta el 1 de noviembre. ¡Corre 1km+, una epopeya de altura!
Los Himalayas, más de un centenar de montañas superiores a los 7.200 metros de altura, hogar del monte más alto del planeta, el Everest, recibieron el espíritu solidario de Corre 1km+. El movimiento, que participa en la presente edición de la Himalayan Race, llegó a Nepal dispuesto a inscribir su epopeya solidaria en una de las pruebas más bellas del planeta.
Sin límite de edad ni tiempo de corte -ocho días, siete noches; de viernes a viernes-, más de cien corredores venidos de todos los rincones compiten en una prueba de altura diseñada para disfrutar. Calificado del mejor maratón del mundo por la revista Runners World, los 160 kilómetros del Himalayan Race se realizan en cinco etapas, de entre 21 y 42 kilómetros, que se disputa desde el 25 de octubre pasado y hasta el 1 de noviembre en la impresionante cordillera fronteriza entre Nepal e India y anclada en la provincia bengalí de Darjeeling, famosa por su té.
Durante las dos primeras jornadas, pensadas para que los corredores se aclimaten a la altura del terreno, los participantes pueden correr a su antojo, relajarse en Mirik Lake Resort, visitar monasterios, plantaciones de té, el International Mountain Museum, contemplar las espectaculares vistas del Everest y del Kanchenjunga desde el Parque Nacional Sandakphu. La tercera, se celebra el ansiado maratón, el Stage Race Day 3, que se celebró en Sandakphu (3.600 metros de altura) a lo largo de un sendero con espectaculares vistas a la montaña que en su recorrido se transforma en exuberante selva hasta alcanzar la remota aldea de Rimbik (2.100). Un paraíso para los sentidos que por su penetrante belleza ha arrancado lágrimas de emoción en anteriores ediciones.
Correr, caminar o pedalear. Cualquiera que participe en una de las tres modalidades de competición del Himalayan Race sufrirá las eternas distancias y las alturas descomunales pero, en compensación, tendrá ocasión de disfrutar de la diversidad cultural de las religiones hindú y budista, del encanto colonial de Darjeeling, del paisaje, de las cenas en entornos formidables.
Como una metáfora, el Himalayan Race se levanta con toda su largura subrayando la razón de ser de Corre 1km+: superación y altura de miras, esfuerzo y disfrute, dolor que se supera con solidaridad.
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