El descuelgue de los convenios supone la revisión de las condiciones laborales en las empresas. La reforma laboral de 2012 introducía mayor facilidad para que empresarios y trabajadores pudieran pactar estas inaplicaciones. El objetivo, según el Gobierno, era el de evitar despidos.
Los trabajadores afectados por los descuelgues registrados hasta el mes de julio sumaron 28.075, un 45,2% menos que en los siete primeros meses de 2014.
Siete de cada diez trabajadores afectados por estas inaplicaciones (20.591) se concentraron en el sector servicios, donde se produjeron 798 ‘descuelgues’, mientras que 6.303 afectados pertenecían a la industria (136 ‘descuelgues’), 841 al sector de la construcción (63 inaplicaciones), y 340 al sector agrario (7 inaplicaciones).
El 42,8% de los trabajadores afectados hasta julio por inaplicaciones de convenio está empleado en empresas de 250 trabajadores o más, donde se produjeron 30 ‘descuelgues’, si bien la mayor parte de las empresas que piden inaplicar el convenio (86,1%) tienen plantillas de entre 1 y 49 trabajadores.
La mayor parte de las inaplicaciones presentadas hasta julio, el 90,7%, indican que se han ‘descolgado’ de la cuantía salarial pactada en convenio. En concreto, el 63,8% señala que sólo se han ‘descolgado’ de la cuantía salarial, mientras que el 12,7% ha inaplicado el sistema de remuneración además de la cuantía salarial.
El 91,3% de los ‘descuelgues’ se resolvieron con acuerdo entre las partes en el periodo de consultas y el 96,8% han inaplicado un convenio o varios de ámbito superior a la empresa, de acuerdo con los datos del Ministerio.
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