Cinco claves para seducir a los ‘millenials’… para trabajar en el extranjero

Ciberseguridad, big data, robótica… En la actual economía digitalizada se está disparando la creciente demanda empresarial de nuevos perfiles profesionales con altas capacidades tecnológicas como es el caso del talento millennial –el colectivo laboral de los primeros nativos digitales- cuya oferta es todavía insuficiente y además muy dispersa en el mercado hiperconectado, altamente competitivo. La eficiente gestión de la movilidad internacional para atraer el talento de esos codiciados jóvenes -nacidos en las dos últimas décadas antes de 2000- con grandes destrezas digitales se ha convertido en piedra angular para el éxito de los negocios, según se destaca en una guía recién elaborada por la multinacional EMS – Employee Mobility Solutions líder en servicios de movilidad internacional de empresas y profesionales de trabajadores, en donde se detallan las cinco claves que determinan las preferencias de la generación del milenio a la hora de aceptar un trabajo en el extranjero.

La consejera delegada de EMS, Ana Gazarian, asegura que “para expandirse en la actual era tecnológica, las empresas globales tendrán que ser capaces de atraer el talento milénico, un colectivo que para 2020 representará más de un tercio de la fuerza de trabajo en el mundo, y entre cuyas demandas profesionales para desplazarse al extranjero priorizan una mayor flexibilidad laboral y conciliación familiar así como asignaciones internacionales más breves que las convencionales”.  

Su lista de preferencias es la siguiente: 

1. Gran interés por la reubicación laboral internacional  

A los millennial les interesa más la experiencia laboral en el extranjero que a cualquier otra generación. Suelen verse a si mismos como ciudadanos globales del mundo y disfrutan mucho de los viajes fuera de su país, tanto para vivir como para trabajar. Por ello, las compañías que les ofrezcan múltiples asignaciones en el extranjero a corto plazo estarán en mejores condiciones para atraer a este talento joven y brillante, predispuesto a entornos diversos, multilingües y de gran diversidad cultural. Suelen rotar de trabajo y no acostumbran a superar los tres años de media de permanencia en la misma empresa. 

2. Exigencia de flexibilidad en sus programas de reubicación profesional  

La conciliación personal y familiar es uno de los aspectos más valorados por la generación del milenio a la hora de aceptar una oferta de trabajo en el extranjero. Para muchos el horario de oficina forma parte de esquemas obsoletos, porque lo importante para ellos son los resultados y la productividad y no fichar a una hora u otra. 

3. La formación profesional y el asesoramiento, entre sus prioridades  

La empresa debe ofrecer programas de formación continua al millennial brillante, para quien es clave seguir aprendiendo después de moverse a otro país a trabajar, dada la importancia que da al refuerzo de sus habilidades y al aprendizaje de nuevas capacidades. Este empleado también valora el asesoramiento en su proceso de adaptación al nuevo país para agilizar el proceso. 

4. Convivencia con la tecnología  

Para esta generación que ha crecido «conectada» a internet, el dominio de las nuevas tecnologías es su gran atractivo empresarial, y el propio empleado reclama disponer de las últimas herramientas tecnológicas en su día a día para trabajar y gestionar todo tipo de tareas, incluidas las administrativas. Por ejemplo, para el escaneo de recibos, el envío de gastos por correo electrónico o la verificación virtual del estado de sus movimientos financieros en cualquier momento y lugar.

5. La comunicación instantánea 

Los millennial exigen resolver las cosas rápido y anteponen la comunicación por correo electrónico o la mensajería en tiempo real a las llamadas telefónicas o cualquier otro medio de comunicación convencional. Las opciones son variadas, desde WhatsApp, hasta WeChat, Skype, Facebook Messenger o cualquier otro sistema del que disponga la empresa. Están acostumbrados a las interacciones rápidas y esperan esa misma agilidad por parte de sus equipos de trabajo.  

Con un desempleo apenas inexistente en el caso del talento millennial, las empresas que quieran expandirse no tendrán más opción que ajustar sus políticas de movilidad internacional a las prioridades de ese colectivo. Según la consejera delegada de EMS, estos empleados se convertirán a pasos agigantados en los grandes líderes empresariales del mañana. «Resulta fundamental -añade- atraer pronto a los mejores, a los más brillantes, adaptando con éxito las políticas de reubicación profesional de las empresas para satisfacer sus necesidades».