¿Qué ocurre cuando una IA experta puede auditar, en tiempo real, cualquier decisión dentro de una empresa? Esta pregunta deja de ser una hipótesis futurista para convertirse en un nuevo paradigma en las organizaciones empresariales. Tal y como se destaca desde Setesca Talent, consultora especializada en selección de perfiles tecnológicos y de alta dirección, nos enfrentamos a un escenario en el que cada propuesta de un colaborador o instrucción de un responsable puede ser validada —o cuestionada— al instante por una inteligencia artificial, lo que plantea nuevos retos y oportunidades para la gestión empresarial.
Una nueva era de transparencia radical
En palabras de Jordi Damià, CEO de Setesca Talent, “Estamos entrando en una era sin precedentes: ya no hablamos sólo de acceso universal a la información, sino de acceso a conocimiento experto específico y aplicable, de forma inmediata. Esto cambia completamente las reglas del juego para cualquier profesional”.
Las implicaciones de este nuevo entorno no son menores. Según Damià, las organizaciones tendrán que adaptarse a una convivencia constante entre la validación humana y la validación digital. En la práctica, esto supone un aumento drástico en el nivel de exigencia en la calidad de propuestas, tanto desde los niveles directivos como operativos. La IA se convierte en un nuevo «referente técnico», capaz de contrastar decisiones, señalar errores y plantear alternativas con una agilidad inalcanzable para los equipos tradicionales.
¿Qué ocurre si la IA contradice a un líder? ¿O a un colaborador?
Se plantean escenarios inéditos: ¿cómo gestionará una empresa el hecho de que un directivo dé una instrucción que la IA califica como incorrecta? ¿Cómo afectará al clima laboral si se demuestra que un colaborador ha aportado una propuesta errónea? Tal y como destaca Setesca Talent, la autoridad tradicional se ve ahora desafiada por una nueva dimensión: la autoridad algorítmica.
“Ya no es suficiente tener un título o un cargo; es imprescindible tener criterio y conocimiento técnico real. Validar lo que propone la IA, y saber cuándo corregirla o cuándo apoyarse en ella, será clave para el liderazgo del futuro”, apunta Damià.
El valor humano como ventaja diferencial en caso de “apagón digital”
Uno de los puntos más disruptivos del análisis es la hipótesis de un posible «apagón de IA»: situaciones en las que, por fallo técnico o decisión estratégica, la validación digital no esté disponible. En ese contexto, Setesca Talent subraya que solo aquellos profesionales con criterio profundo, dominio técnico y habilidades humanas podrán sostener decisiones críticas.
Este escenario cobra aún más relevancia si se tienen en cuenta los datos recientes del Future of Jobs Report 2025 del World Economic Forum, que indican que el pensamiento analítico sigue siendo la habilidad básica más buscada entre los empleadores, y 7 de cada 10 empresas la consideran esencial. También lo son la resiliencia, la flexibilidad y la agilidad, y el pensamiento creativo, junto con el liderazgo y la influencia social.
De colaboradores a “curadores de decisiones”
En este nuevo contexto, el papel de los profesionales evoluciona: más que simplemente ejecutar tareas, se convierten en curadores de decisiones, responsables de validar, adaptar y enriquecer las propuestas generadas (por humanos o por máquinas). Esto implica no solo formación técnica, sino también un sólido desarrollo de habilidades críticas.
“El conocimiento experto será accesible para todos, pero diferenciarse dependerá de cómo usamos ese conocimiento. El éxito profesional será, en gran parte, una cuestión de criterio”, concluye Jordi Damià.