Por quinto año consecutivo, la consultora Lukkap pone en marcha una nueva edición del programa ‘Aprender a volar’, una iniciativa que, desde hace años, ofrece apoyo y orientación para hijos de empleados de sus clientes que se encuentren en búsqueda de su primer trabajo después de haber finalizado sus estudios.
Aunque si echamos la vista atrás, el panorama actual es más esperanzador, la incorporación al mercado laboral de los recién titulados sigue resultando un proceso complejo ya que, a pesar de estar más preparados que nunca, son muchos los obstáculos a los que tienen que hacer frente antes de poder entrar en el mundo laboral: prácticas no remuneradas, becas, trabajos extras… Por este motivo, y en el marco de su estrategia de RSC y de su firme apuesta por el apoyo a los jóvenes, Lukkap ha puesto en marcha la quinta edición de esta iniciativa con más de 40 inscritos en el programa. “Nuestra misión como compañía busca transformar personas y empresas, de ahí que, basándonos en nuestra metodología y conocimiento, decidiésemos poner en marcha un programa pensado para un importante activo futuro como son los jóvenes” señala Itziar Nieto, Socia-Directora en Lukkap.
Y es que, recibir orientación en un momento tan importante como es la finalización de los estudios, puede marcar un antes y un después en sus carreras. Por ello, el equipo de Lukkap ha diseñado un programa que incluye seminarios grupales donde desarrollar aquellas habilidades más demandadas en el mundo laboral, así como talleres de networking, preparación de entrevistas o grupos de trabajo donde aprender a desarrollar un currículo o carta de presentación. Además, este programa cuenta con sesiones individuales con los consultores de la compañía para trabajar de forma más personalizada y orientar a los participantes en su futuro profesional.
Tras el éxito de las ediciones anteriores – determinantes en la carrera de muchos de sus participantes – Lukkap pone en marcha una nueva edición, en la que participan empresas de la talla de Coca-Cola, BMW, SEUR o Cofares, motivados por continuar ayudando y apoyando por los jóvenes, en un momento determinante de sus vidas. “Se trata de un momento delicado en el que los jóvenes, bien por desconocimiento o bien por falta de oportunidades, tienen que enfrentarse a decisiones importantes que marcarán su desarrollo. Para nosotros poder ayudarles en este punto es más un orgullo que otra cosa; significa que con cada pequeño gesto podemos contribuir con la sociedad”concluye Itziar Nieto.
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