La época estival no solo invita al descanso y al ocio, sino que también representa una oportunidad única para avanzar en el desarrollo profesional. Una tendencia que ha aumentado en los últimos años. De hecho, un informe del Ministerio de Educación y Formación Profesional muestra un crecimiento de hasta el 15% en la matrícula de cursos de verano en universidades y academias de España.
Desde Faro Edtech, compañía especializada en formación sanitaria e innovación tecnológica, enumeran las 5 principales características que hacen de los meses de julio y agosto el momento ideal para impulsar tu carrera profesional:
- Menor carga de trabajo = más tiempo para formarse: En muchos sectores, el verano implica una reducción temporal de la actividad, lo que libera tiempo para realizar cursos, asistir a talleres online o actualizar competencias clave. Esta “calma formativa” permite concentrarse en el aprendizaje sin el estrés habitual.
- Espacio para la reflexión y la planificación: El verano invita a hacer una pausa y evaluar el rumbo profesional: ¿Estoy satisfecho con mi trayectoria? ¿Qué habilidades necesito fortalecer? ¿Cómo quiero crecer en los próximos meses? Esta introspección es esencial para trazar un plan de acción.
- Oferta formativa adaptada a la temporada: Muchas instituciones y plataformas de formación, como el caso de Faro Edtech, ofrecen programas breves, flexibles y online.
- Ventaja competitiva: Aquellos que aprovechan el verano para capacitarse llegan a septiembre con nuevas herramientas, ideas y motivación, posicionándose mejor para asumir nuevos proyectos, ascensos o incluso cambios de rumbo profesional.
- Desarrollo sin desconexión total: Avanzar en el desarrollo profesional no significa renunciar al descanso. Gracias a la formación digital y a los contenidos on demand, es posible compatibilizar el aprendizaje con las vacaciones, dedicando solo unas horas a la semana.
El verano, ideal para preparar las oposiciones
Por su parte, “el verano es también el momento ideal para realizar formaciones que permitan sumar puntos en los baremos de bolsas de empleo y oposiciones públicas, muchas de las cuales abrirán convocatoria en los próximos meses de septiembre y octubre”, afirma Lorena García, especialista en el área académica en Formación Alcalá, del grupo Faro Edtech.
Con una oferta formativa cada vez más accesible, flexible y adaptada al ritmo de cada persona, los cursos baremables y acreditados se convierten en la herramienta perfecta para aprovechar el tiempo libre y reforzar el currículum. Además, estas formaciones no solo permiten mejorar la puntuación en los procesos públicos, sino también adquirir competencias clave que favorecen la empleabilidad, la especialización y la actualización profesional en sectores como la sanidad, la educación, los servicios sociales o la administración pública. Eso sí, “es importante revisar que los títulos estén debidamente acreditados y se ajusten a los requisitos específicos de cada bolsa u oposición”, asegura García.
Lejos de ser solo una época de descanso, el verano puede convertirse así en una valiosa oportunidad para reflexionar, aprender y avanzar profesionalmente. Con un ritmo laboral más relajado en muchas empresas y más tiempo disponible para la formación, cada vez más profesionales aprovechan estos meses para invertir en su crecimiento y prepararse para los retos del último trimestre del año.
Invertir unas horas a la semana en verano para formarse puede marcar la diferencia el resto del año. Ya sea reforzando idiomas, habilidades de liderazgo o herramientas digitales, el desarrollo profesional no entiende de estaciones, pero el verano sí ofrece las condiciones perfectas para impulsarlo.