El 38 % de los autónomos reconoce que esperará “hasta el último momento” para adaptarse a la factura electrónica, según un estudio elaborado por TeamSystem, compañía experta en digitalización de pymes y autónomos. Una actitud que entraña riesgos, ya que la nueva norma de Hacienda —conocida como VeriFactu— establece sanciones que pueden alcanzar los 50.000 euros si se detecta la emisión de facturas a través de sistemas no homologados.
A pesar de que VeriFactu afecta directamente a documentos clave como las facturas y los tickets, la mayoría de los negocios aún no se ha puesto en marcha para adaptarse. De hecho, 9 de cada 10 autónomos y pequeñas empresas siguen sin conocer cómo les afecta la nueva norma, mientras que casi un 30 % percibe más inconvenientes que ventajas, debido a la falta de información y al temor al cambio.
TeamSystem recuerda que, si bien desde el pasado 29 de julio ya es obligatorio que los desarrolladores de software adapten sus soluciones a los nuevos requisitos técnicos establecidos por Hacienda, a partir del 1 de enero de 2026 la norma será de obligado cumplimiento para las empresas que tributan por el Impuesto sobre Sociedades y desde el 1 de julio del mismo año, para los trabajadores autónomos.
En cualquier caso, TeamSystem recomienda no esperar a las fechas límite y empezar desde ya a revisar procesos, entender cómo impacta la norma en la operativa diaria y corroborar que se dispone de una herramienta de facturación compatible. En este sentido, aunque los proveedores tecnológicos son los encargados y responsables de garantizar el cumplimiento técnico, cada negocio debe asegurarse de que cuenta con una solución adecuada antes de que sea demasiado tarde.
“Las prisas de última hora pueden provocar errores que acaben teniendo consecuencias muy negativas para las cuentas de cualquier empresa. Cuanto antes se empiece a probar el sistema y a familiarizarse con su funcionamiento, más suave y sencilla será la transición y menores serán los riesgos para las empresas”, señalan desde TeamSystem.