Las nuevas medidas aprobadas recientemente por el Consejo de Ministros en materia de permisos parentales para asalariados, autónomos y funcionarios evidencian un avance institucional hacia la conciliación. Sin embargo, los datos reflejan que aún queda mucho camino por recorrer para lograr un equilibrio real entre vida personal y laboral en el entorno profesional español.
Según el III Estudio de Retos y Tendencias en RRHH de Pluxee, el 55% de los empleados afirma no estar satisfecho con las medidas de conciliación que ofrece su empresa. Esto, a pesar de que el 76% de las compañías ya ofrece horarios flexibles y el 62% apuesta por modelos híbridos o remotos.
Aun así, casi la mitad de los trabajadores (44%) reconoce que no consigue alcanzar una conciliación real. Los principales obstáculos señalados por los empleados son la falta de flexibilidad horaria, la ausencia de opciones de teletrabajo y la carencia de políticas específicas para compatibilizar la vida laboral y familiar.
Además, el estudio pone en evidencia una consecuencia directa: el 85% de los trabajadores se plantearía cambiar de empleo si su actual compañía no ofreciese medidas reales de conciliación. Esta tendencia es aún más marcada entre los más jóvenes: la mitad de los profesionales pertenecientes a las generaciones Millennial y Z estaría dispuesta a cambiar de empresa por este motivo.
Estos datos subrayan la urgencia de reforzar las políticas de conciliación en las organizaciones como una medida clave no solo para el bienestar de los trabajadores, sino también para la atracción y retención del talento.
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