En Valle Gran Rey, es de sobra conocido, que entre las prioridades del equipo de gobierno de Coalición Canaria no entran la defensa y el bienestar de los trabajadores municipales. Siendo práctica habitual el utilizar la precariedad laboral como arma política y fuente de clientelismo. Sin embargo, ni siquiera en este marco de coacción permanente al que someten a los trabajadores municipales, nunca antes se habían atrevido a llegar tan lejos: despedir a una trabajadora municipal por no gustarle al alcalde, ni a su equipo de gobierno de Coalición Canaria, el disfraz que lució en la cabalgata de carnaval del pasado 27 de febrero. Motivo por el cual fue llamada, el 27 de marzo, a la casa consistorial para recibir una carta de despido por falta muy grave.
Esa falta muy grave, que ha considerado el alcalde y su equipo de asesores locales, ha sido que la trabajadora municipal, en la cabalgata, se disfrazó de guardia civil, portando en su espalda un letrero que decía: “judicial”, acompañada de su novio disfrazado de preso, con su nombre grabado en el pecho y espalda. Éste portaba una serie de letreros alusivos a diferentes delitos por los que se encuentra imputado algún político cercano, que han sido publicados por todos los medios de comunicación. Igualmente, una muñeca hinchable colgada de su cuello representaba alguna fantasía que cada persona interpretaba como quisiera.
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