El sindicato UGT adelantó en el Consejo de Administración celebrado ayer que votará a favor del inicio de conversaciones para la fusión de Unicaja y Caja Castilla-La Mancha si se garantiza la viabilidad y solvencia del proyecto empresarial y la elaboración de un protocolo laboral que asegure el empleo y el conjunto de condiciones laborales y sociales de las plantillas de ambas entidades.
Según UGT, las cajas de ahorro están padeciendo, al igual que todo el sistema financiero, "los efectos de la crisis económica y financiera dado su tradicional apoyo a las familias y a los proyectos de desarrollo territorial". "Desde distintos ámbitos económicos y financieros se está animando a las cajas a fusionarse como fórmula para adquirir mayor volumen y solvencia y poder salir más reforzadas de la situación actual", argumenta.
UGT apunta por tanto que dará su apoyo a esta posible fusión entre las dos entidades si previamente al inicio del proceso se suscribe un protocolo laboral con los sindicatos más representativos de los trabajadores que garantice y equipare las mejores condiciones laborales, profesionales y de previsión social existentes, así como la garantía de que no se producirán despidos.
También pone como condición que la entidad resultante tenga una dimensión, recursos y potencialidades, cualitativamente superiores a la mera suma de las entidades que se fusionan, y que suponga una mejora importante para la inversión, la acción social y el desarrollo industrial en los territorios de los que son originarias y en los que se encuentran implantadas.
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