El presidente del comité de empresa de Santana Motor, Pedro Galvez, ha afirmado que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que se ha firmado con la dirección y que se hará efectivo el próximo 7 de enero, "no paraliza" el trabajo de mejora de los vehículos.
Gálvez se ha mostrado confiado en que este expediente, que afectará a 363 trabajadores de la rama militar de los casi 600 de la plantilla, resuelva "un problema coyuntural", y ha insistido en que 2009 se debe convertir "en un año de transición".
"Tenemos las esperanzas puestas en que en 2009 se pueda mejorar la situación", ha afirmado el presidente del comité de empresa, quien ha resaltado que se continúa trabajando con los modelos y sus modificaciones, "para lanzarlos con nuevas características".
Gálvez ha precisado que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) se hará efectivo a partir del próximo 7 de enero, cuando dejarán de acudir a la fábrica los 363 trabajadores, que volverán el 26 del mismo mes.
A partir de esa fecha, el calendario previsto que se contempla en el expediente es que los empleados trabajen en semanas alternas, hasta el final de año, con lo que serán en torno a cien días laborables, según Gálvez.
En cuanto a la producción de la fábrica linarense, Gálvez ha recordado que dirección y sindicatos han acordado que para el primer trimestre de 2009 se reduzca en casi un 70 por ciento, produciendo del modelo Massif, de la marca Iveco, cinco diarios en enero y febrero y diez en marzo, y del Jimny (que se producirá hasta septiembre de 2009) se fabricarán una veintena de vehículos durante los dos primeros meses y diez en el tercero.
De esta forma hace frente a una difícil situación sufrida en el año recién concluido, puesto que de enero a noviembre la firma linarense ha matriculado un 57,3 por ciento menos de vehículos, pasando de los 979 de 2007 a los 418 de 2008.
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