Unas dos mil personas se manifestaron ayer en Barcelona contra la crisis económica y en contra de elevar la jornada laboral a 65 horas.
La manifestación ha servido para protestar contra la directiva europea que pretende elevar la jornada laboral a 65 horas semanales y se ha convocado bajo el lema ‘Que su crisis la paguen ellos. No a las 65 horas’.
La marcha se inició a media tarde en Plaza Universidad y finalizó en Plaza Sant Jaume, y a ella también se unieron estudiantes que se oponen al Plan Bolonia.
Según señalaron fuentes de la Guardia Urbana, la manifestación terminó sin incidentes, salvo algunas pintadas que se hicieron durante el recorrido.
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