La oferta de acciones de Electricité de France (EDF) reservada para sus trabajadores ha concluido en un fracaso relativo, según los resultados anunciados hoy por el grupo eléctrico, ya que sólo se han suscrito el 39,2% de los títulos.
Los empleados han comprado 3,1 millones de acciones de los 7,94 millones que se les había propuesto a un precio de 66 euros cada uno.
Eso significa que el Estado, que era quien había puesto en venta el 0,4% del capital, sólo se desprenderá únicamente del 0,2% e ingresará 204,6 millones de euros.
Al término de esta operación, el Estado mantendrá el control sobre el 84,6%, mientras los inversores institucionales tendrán el 13,3% y los asalariados el 2,1%.
La dirección de la empresa consideró que la venta no se puede considerar un fracaso teniendo en cuenta el ‘contexto de turbulencia bursátil’.
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