La consellera de Trabajo y Formación, Margarita Nájera, reconoció ayer que el sector servicios no podrá absorber el importante volumen de desempleados que ha generado en las islas la crisis de la
La consellera reconoció que las islas se encuentran en una situación de “dificultad” provocada por la desaceleración global, la falta de confianza y la reducción del consumo interno. Aun así, destacó que en comparación con otras comunidades como Murcia o la Comunidad Valenciana el efecto de arrastre de la construcción en las islas es mucho menor, y confió en que las buenas perspectivas turísticas mejoren las cifras de empleo en el archipiélago.
Así, admitió que los pronósticos iniciales que apuntaban que el turismo absorbería “gran parte” de los parados de la construcción no se han cumplido debido a que la desaceleración está siendo más intensa de lo previsto.
“Está habiendo un parón en seco de la construcción, mucho más fuerte que de lo que se pensaba”, destacó la consellera, quien consideró, sin embargo, que Baleares es, junto a Aragón, la comunidad que “mejor” está respondiendo a la crisis, como lo demuestra el crecimiento en el número de contratos (39.357).
Finalmente, la responsable de Trabajo enfatizó las medidas “extraordinarias” que adoptará el Govern para frenar la desaceleración acelerando las inversiones del Govern.
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