Casi cien mil trabajadores alicantinos -98.707, en total- se marcharon a trabajar a otras provincias españolas en el último año, tal como recogen los datos del Ministerio de Trabajo e Inmigración, extraídos del Informe de Mercado de Trabajo 2007 elaborado por la Dirección Provincial. Dicho volumen supone una tasa de salida de mano de obra del 16,17 por ciento, que es el porcentaje del número de contratos realizados a personas con domicilio en la provincia, pero que el centro de trabajo está ubicado en otro territorio diferente, sobre el total de las contrataciones realizada a personas con domicilio en la propia provincia.
Murcia se mantiene como destino de referencia para los asalariados alicantinos, con un total de 35.867 contratos de trabajo, seguida de Valencia que absorbe hasta 21.965 altas laborales. En ambos casos la proximidad geográfica se convierte en un factor determinante, favorecido por el hecho de que existe una mayor relación de intercambio económico frente a otras zonas.
Con todo, la movilidad de personal registrada desde Alicante en ambas direcciones es recíproca, aunque predominan más los que se marchan fuera a trabajar que los que llegan aquí procedentes de dichos territorios. En el caso murciano, los residentes de dicha región contratados en los municipios de la Costa Blanca ascendieron a 20.359 personas, lo que supone que fueron 15.508 alicantinos más los que se marcharon allí frente a los murcianos que llegaron aquí.
Este diferencial entre los que salen y los que entran también acontece del mismo modo en el caso de Valencia, puesto que los valencianos que vinieron a trabajar a la provincia se situaron en 11.778, casi la mitad menos que los alicantinos que tuvieron que subir hasta allí.
En el conjunto global, Alicante fue receptora durante 2007 de 66.791 trabajadores procedentes de toda España, que en comparación con los casi cien mil alicantinos que tuvieron que desplazarse a otras provincias, deja un diferencial de salida de 31.916 personas más.
La tasa de entrada de personal llegado de otras provincias se sitúa, de esta forma, en el 11,54 por ciento, que es el porcentaje del número de contratos con destino en Alicante, realizados a trabajadores cuyo domicilio está en otro territorio, sobre el total de contratos formalizados en la propia provincia.
Dicho índice está en la línea acontecida en otros años, sin grandes variaciones. Durante 2006, esa tasa de entrada fue del 13,24 por ciento.
Lo que sí se reflejan son más diferencias en la comparativa de los últimos dos ejercicios en valores absolutos. En concreto, en 2006 fueron 87.890 alicantinos los contratados en el resto de España, mientras que en 2007 se produjo un incremento de 10.817 altas. En cambio la provincia fue receptora en aquel de año de un total 80.513 trabajadores llegados de otros lugares, cuando en el pasado ejercicio apenas ha alcanzado 66.791, lo que evidencia un fuerte descenso de 13.722 contrataciones.
La recesión inmobiliaria y el parón económico generalizado explican en gran parte la caída de la demanda de personal por parte de las empresas alicantinas.
Los comentarios están cerrados.