El grupo papelero sueco finlandés Stora Enso obtuvo un beneficio neto de 66,5 millones de euros en los tres primeros meses de 2008, lo que supone un pronunciado recorte del 66,3% respecto al mismo periodo del año anterior, debido a la fortaleza del euro y al encarecimiento de la materia prima, así como al menor precio del papel por la caída de la demanda.
La cifra de negocio de la compañía alcanzó los 2.831,8 millones de euros, un 5,6% menos, mientras que el beneficio operativo disminuyó un 58,1%, hasta 125 millones de euros.
‘Los resultados son claramente insatisfactorios’, reconoció el consejero delegado de Stora Enso, Jouko Karvinen, quien aprovechó para defender la reestructuración puesta en marcha en el tercer trimestre de 2007, que supuso el cierre de tres plantas en Suecia y Finlandia y el despido de 1.485 empleados, de los que ‘como mucho 850 trabajadores’ podrían acogerse a oportunidades de recolocación.
Por otro lado, Karvinen pronosticó un debilitamiento en la demanda de papel de periódico en Europa y una leve mejoría en la demanda de papel de revista. Asimismo, prevé que la demanda en Latinoamérica se mantenga firme, mientras que en China las perspectivas son positivas.
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