Más de 800.000 europeos del este se han registrado oficialmente para trabajar en Gran Bretaña desde que sus países entraron en la Unión Europea hace cuatro años, según indican las últimas estadísticas.
Quienes trabajan por cuenta propia, ya sean, por ejemplo, fontaneros o decoradores, no tienen que registrarse, con lo que la cifra total de inmigrantes supera seguramente el millón, informa hoy el diario ‘The Daily Telegraph’.
Según estadísticas oficiales, el 82 por ciento de los que han solicitado permiso de trabajo tienen edades de entre 18 y 34 años y la mayoría son varones.
Por otro lado, el Reino Unido ha concedido otros 30.570 permisos de trabajo a ciudadanos de Bulgaria y Rumanía, países ambos que se convirtieron en miembros de la UE el año pasado.
La mayoría de los europeos del este dicen que vienen aquí para un período máximo de tres meses aunque es imposible saber cuántos han regresado a sus países de origen.
Un 39 por ciento de los registrados han encontrado trabajo en la administración y las empresas, un 19 por ciento en la hostelería y restaurantes, un 10 por ciento en la agricultura, un 7 por ciento en la industria manufacturera y un 5 por ciento en la de procesado de alimentos.
Según David Frost, director general de las Cámaras de Comercio Británicas, los empresarios están contentos con los inmigrantes porque tienen una ‘ética de trabajo’ superior a la de los británicos y contribuyen además a paliar la escasez de mano de obra especializada en este país.
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