Una misteriosa directora de RRHH ha llevado el arte del disimulo al siguiente nivel. Sus compañeros de departamento aseguran que ha incorporado bolsillos secretos en su vestimenta para ocultar su móvil.
Lo cierto es que, mientras el resto busca enchufes, ella ya tiene el teléfono escondido como si fuera un agente secreto en misión confidencial. ¡Cuidado! Que lo mismo tiene también un currículum ahí dentro.