En un mundo empresarial donde el compromiso, la colaboración y la adaptabilidad son más necesarios que nunca, las organizaciones buscan nuevas formas de entender a las personas que las componen. Frente a los modelos tradicionales, herramientas como los mapas de comportamiento están revolucionando el enfoque del desarrollo personal y de equipos, ofreciendo una experiencia visual, emocional y profundamente transformadora.
Verónica Carrascosa, fundadora de Entendery, nos guía en esta entrevista por el universo de MapsTell, una metodología basada en el modelo DISC, pero con un enfoque lúdico y cartográfico que invita a los profesionales a embarcarse en un viaje de autoconocimiento, empatía y crecimiento. A través de esta conversación, descubrimos cómo estos mapas no solo generan insights accionables, sino que también mejoran la cohesión de los equipos, previenen conflictos y refuerzan el liderazgo en entornos cambiantes y diversos.
Una mirada diferente, creativa y poderosa para transformar dinámicas laborales desde el comportamiento observable y la metáfora del viaje. ¿Listo para ubicarte en el mapa?
En un contexto donde las empresas buscan mejorar el engagement y la fidelización ¿cómo pueden herramientas como los mapas de comportamiento ayudar a los equipos de RRHH a ir más allá de los test tradicionales y generar insights accionables?
Los mapas de comportamiento invitan a un viaje al conocimiento propio y de los demás de manera visual, lúdica y efectiva. A diferencia de los tests tradicionales que suelen olvidarse en un cajón, los mapas despiertan curiosidad y comparten con facilidad. De hecho, al entregarlos se preguntan abiertamente por qué otros tienen volcanes, más agua o tierra, así como diferentes medios de transporte.
Este formato activa la parte creativa e intuitiva del cerebro, facilitando esos insights o descubrimientos.
Lo interesante es que esos insights se convierten en planes de acción concretos gracias al recorrido del mapa entre la ubicación actual y el destino. En ese trayecto aparecen lugares como “Planificar”, “Plazo límite”, “Objetivos”, “Nuevas Orientaciones”,… Y esto, acompañado de preguntas de coaching y el poder de la metáfora de ese viaje, facilitan a la persona su plan de acción al tener que pensar sobre dónde hará parada, cuántas noches o qué adquirirá de los lugareños en cuanto a hábitos o formas de pensar.
Un viaje en el que se amplía la mirada y se desmontan esas creencias que impiden avanzar.
MapsTell se basa en el modelo DISC, pero con una capa visual y experiencial muy potente. ¿Cómo influye esta representación creativa en el aprendizaje y la autoconciencia de los equipos?
La cartografía asociativa de MapsTell transforma algo complejo como es el comportamiento humano en algo visual y accesible. Los nombres de ríos, ciudades o montañas, hacen alusión a comportamiento. Las personas se ven literalmente recorriendo lugares en el mapa y esto produce ese impacto emocional duradero.
La metodología permite verse en un entorno que no encasilla, sino que invita a moverse. No somos árboles plantados en un sitio sino personas con la capacidad de explorar distintas zonas del mapa según el contexto. No etiqueta a alguien como “rojo” o “azul” sino que habla de dónde estás en lo que se llama “El Mundo de Diferencia”, de ubicaciones preferentes y comportamientos observables.
La diversidad de perfiles en un equipo suele derivar en roces. ¿De qué manera los mapas visuales facilitan la gestión de conflictos y fomentan la empatía entre colaboradores con estilos de comunicación opuestos?
Muchos conflictos surgen por cuestiones de percepción, no por mala intención. Visualizar en el mapa dónde está cada miembro del equipo ayuda a entender los estilos de comunicación, la manera de tomar decisiones o establecer prioridades. Se ve la necesidad de ponerse en el lugar del otro para entenderse. No se trata de cambiar a nadie, sino de construir puentes y que puedan cruzar de un área a otra.
Los mapas ayudan a bajar la tensión emocional porque la conversación se traslada del plano personal al comportamiento observable. Y eso, de por sí, ya es un cambio de juego en la gestión de conflictos. Pues de repente alguien que era “directo y brusco” ahora se ve como alguien con orientación a resultados al que le vendría bien visitar algún lugar cerca de la frontera de la orientación a personas como “Asertivo”, “Empático” o “Comprensivo” para colaborar mejor.
¿De qué manera estas herramientas ayudan a potenciar el liderazgo en un entorno empresarial cada vez más diverso y cambiante?
Un liderazgo eficaz comienza por conocer a las personas del equipo. Un líder que sabe dónde está cada uno en el mapa, comprende qué motiva a cada uno, qué le bloquea y qué estilo de comunicación necesita.
En entornos tan volátiles y cambiantes, un mapa amplía el abanico de recursos, invitando a espacios de diálogo en los que se fomenta la escucha y la empatía. Y eso, da como resultado compromiso, innovación y rendimiento.
¿Has visto casos en los que la utilización de mapas de comportamiento haya transformado dinámicas de equipo conflictivas o poco cohesionadas? ¿Puedes compartir algún ejemplo?
Sí, muchos. Un caso concreto fue un equipo con un clima tenso y poco colaborativo.
Situarlos sobre el mapa les permitió entender sus distintas percepciones y formas de responder a las situaciones. Ver que estaban en lugares diferentes del mapa. Ver que unos actuaban con ritmo rápido y con foco a soluciones; los otros, atendían a normas, necesitaban hacerse con información y requerían de tiempo para procesarla; otros sentían la necesidad de generar contexto y priorizaban que hubiera armonía.
Al recibir su PersonalMap en A3, a todo color, surgió la curiosidad y la conexión con preguntas como:
“¿Por qué tienes tanta tierra y yo tanta agua? ¿Qué significan tus volcanes? ¿Cómo se llaman tus medios de transporte?
Este enfoque, no solo cambió la forma de verse sino también de relacionarse permitiéndoles una comunicación abierta y efectiva.
Hablamos mucho de habilidades blandas, pero ¿cómo conectan estas metodologías con resultados tangibles, como el aumento de la productividad o incluso el cierre de ventas?
Una persona que se conoce, que sabe adaptarse a los demás, hablando el lenguaje en el que se necesita en cada momento, es capaz de relacionarse y conseguir resultados más satisfactorios. Al lograr colaboración hay una repercusión positiva en la productividad e incluso en las ventas.
En ventas, por ejemplo, trabajamos dinámicas sobre el mapa para adaptar el estilo de comunicación al tipo de cliente, logrando una comunicación persuasiva y convincente.
¿Qué retos has encontrado al implementar estos mapas en culturas corporativas tradicionales? ¿Y qué pasos sigue Entendery para democratizar su uso en pymes o sectores menos familiarizados con lo creativo?
El mayor reto está en que vean la utilidad y el dedicarle tiempo a explorar la herramienta. De ahí que planteemos talleres breves de 3-4 horas donde previamente completan un cuestionario de apenas 10 minutos y con el que descubrirán la ubicación de cada uno en el mapa. Tomar conciencia de su estilo, de cómo otros les ven y de sus desafíos.
En cuanto a los pasos, Entendery quiere que cualquier organización, incluso una pyme o un negocio familiar, pueda beneficiarse de estas herramientas para crear equipos conscientes de sus comportamientos y cómo influyen en los demás, fomentar la colaboración y que sean más eficaces en su día a día gracias a una mejor comunicación y liderazgo.
Hacemos para que llegue a todos los rincones del tejido empresarial, independientemente del tamaño, sector o presupuesto y tienen varias vías para ello al estar continuamente por nuestra parte realizando workshops tanto online como presenciales ya sea en la que recién ha sido la semana internacional del coaching, a través de organismos e instituciones o directamente in-company.
Viajar con estos mapas amplía la mirada, potencia el crecimiento y construye un Mundo de Entendimiento.
¿Curiosidad en descubrir tu lugar en el mapa o saber más?
Visita la web en entendery.com o regístrate directamente para descubrirlo en https://bit.ly/