Un devoto cristiano que asegura que un accidente laboral le aumentó la libido, lo que le hizo recurrir a prostitutas y a pornografía, obtuvo el martes una indemnización de más de tres millones de libras (4,5 millones de euros).
Stephen Tame, de 29 años, sufrió heridas graves en la cabeza a causa de una caída, lo que lo transformó de leal esposo recién casado en un «hombre desinhibido» que tuvo dos líos de faldas.
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