Si hay una cosa que ha conseguido implantar el euro en la vida de todos es la total banalización de los importes monetarios. Un ejemplo claro es el rescate de la ya famosa Caja de Castilla-La Mancha.
Aunque para Díaz Ferrán (CEOE) este no sea un tema preocupante, como tampoco lo es para Solbes ni para Fernández de la Vega… y mucho menos para Zapatero, el Gobierno inyectará de las arcas públicas –o sea, dinero que no es de nadie- 9.000 millones de euros en la entidad financiera, para tapar un supuesto agujero de 3.000.
9.000 millones de euros, billón y medio de pesetas (no nos olvidemos de la referencia por si tenemos que salir del euro) es el importe de la inyección.
¿Y a nadie le preocupa?
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