La Unión General de Trabajadores (UGT) y la Unión Sindical Obrera (USO) se mostraron ayer satisfechas por la constitución del Consejo Estatal de Responsabilidad Social de las Empresas (RSE), aprobada en Consejo de Ministros, pero exigen al Gobierno que cumpla con sus funciones.
Según una nota, UGT "desea" que las iniciativas que se pongan en marcha permitan "extender la responsabilidad social de las empresas", así como su "contribución al crecimiento económico, la cohesión social y la sostenibilidad".
Asimismo, el sindicato valora que la presidencia del Consejo corresponda al Ministerio de Trabajo porque "demuestra la importancia" que desde el Gobierno se concede a la implantación y desarrollo de la RSE, así como al papel de los interlocutores sociales en el diálogo social y la negociación colectiva.
Por su parte, USO espera que el organismo aprobado ayer "sea fiel a la esencia de la RSE" y le exige "voluntariedad y compromiso" por encima de las leyes estipuladas para, de esta forma, impulsar su desarrollo para beneficio de los agentes sociales, empresariales y la sociedad en su conjunto.
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