MAPFRE ha donado varios equipos de rehabilitación a la Asociación de Daño Cerebral de Navarra (Adacen), que trabaja con enfermos afectados por este tipo de dolencias, y a IBILI, centrada en personas con discapacidad física.
Adacen dedicará el material a la estimulación de pacientes con ictus y enfermedades neurodegenerativas en su sede en el barrio pamplonés de Azpilagaña. Por su parte, IBILI ubicará los equipos aportados por MAPFRE en sus nuevas instalaciones del barrio de Rotxapea, en las que prevé atender a medio centenar de personas con diferentes tipos de discapacidad física.
Con motivo del acto de entrega, el Director General Territorial de MAPFRE en Norte, Raúl Costilla, trasladó la satisfacción de la entidad por contribuir a la “excelente labor” que realizan estas asociaciones en favor de personas con necesidades especiales.
Tanto el Director de Adacen, Francisco Fernández, como el Presidente de IBILI, Javier Miranda, coincidieron en valorar la importancia de esta donación.
Creada en 2005, IBILI vela por la defensa de los intereses de las personas con discapacidad física en Navarra en el ámbito del deporte adaptado, el ocio, la accesibilidad y la fisioterapia.
En el caso de Adacen, se trata de una organización sin ánimo de lucro especializada en la atención a personas con daño cerebral y a sus familias. Su labor se centra en la atención a pacientes crónicos y personas en situación de dependencia.
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