Un 50% de las personas que trabajamos deberemos actualizar nuestras habilidades si queremos tener buenas experiencias profesionales en 2021 y fruto de ello, las habilidades blandas principales del 40% de los profesionales cambiarán. Lo cierto es que para saber enfocar nuestros perfiles y dar lo mejor de nosotros mismos debemos saber cuáles son las tendencias laborales que se vislumbran dominantes: la transformación digital, la alta especialización tecnológica y las habilidades sociales e integradoras son la clave que marca el nuevo ejercicio.
En un país cuya empleabilidad viene marcada en gran medida por el turismo y sector servicios, ha llegado el momento de que otros sectores tiren de la economía española. Así, hay 5 grandes bloques que marcarán la pauta y todos ellos vienen determinados por la tecnología al servicio de las personas. Como psicóloga especializada en talento y gestión empresarial, son bloques que vienen pisando fuerte desde hace algunos años y, ahora, lideran la evolución profesional.
La experiencia de cliente será esencial y diferenciadora, por ello, puestos relacionados con el marketing y las ventas con especial hincapié en el sector digital serán uno de los principales bloques. El data y la inteligencia artificial vienen dibujándose en los últimos años como arma competitiva para las empresas y la aceleración de la transformación digital ha hecho que este tipo de puestos estén altamente cotizados. Data scientist, desarrollador de business inteligence o expertos en ciberseguridad serían algunos de ellos. De la mano, el tercer bloque sería el que engloba puestos relacionados con la tecnología cloud. Perfiles desarrolladores fullstack, expertos en cloud computing y en agile coach, entre otros. Por último, contaremos con las energías alternativas para el fomento de la sostenibilidad y el sector salud (radiología, blockchain para trazabilidad de órganos y medicamentos, etc) como áreas de impulso laboral.
En estas diferentes áreas son necesarias habilidades técnicas especializadas, todas ellas enlazadas a un fuerte dominio de la tecnología. Pero esto no es lo crucial. En 2021 lo que dará un salto cualitativo a profesionales y organizaciones serán las soft skills. Las empresas serán más que nunca estructuras líquidas con necesidad de personas con una elevada adaptación al devenir de la empresa y el mercado.
Tener la capacidad de ser resolutivo ante problemas y situaciones es una de ellas. Es decir, tener un pensamiento crítico y analítico. Enlazado a ello deberemos trabajar la visión de negocio 360. Para poder trabajar en equipo con estas exigencias, la autogestión será el camino: tener tolerancia a la frustración, al estrés y un instinto de aprendizaje nos harán mejorar. Al igual que lo harán las habilidades comunicativas y emocionales para poder tener influencia social, autoliderarnos, liderar a las personas del equipo y, en definitiva, a relacionarnos bien con las personas del equipo.
Saber trabajarlas pasa, irrenunciablemente, por saber detectarlas, medirlas y tomar el pulso de cómo somos como profesionales individuales y como grupo. Es la única manera de enfocar el crecimiento de los negocios. Durante el último semestre de 2020 desde TUUP, la empresa que lidero, hemos proporcionado la herramienta que lleva este nombre a escuelas de negocios, universidades y empresas de diferente índole. Una mayoría aplastante coincide en que contar con las personas adecuadas y guiarles en el camino óptimo para su perfil y para las empresas con las que se comprometan es el gran activo de las marcas que prosperan. Y es que las empresas valen lo que valen las personas que la forman.
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